TORRES, MIGUEL
U$ 11,08 10,45 €
U$ 11,08 10,45 €
Siendo como es una historia de amor, alcanza una tensi?n dram?tica que nos conduce al delirio y, progresivamente, a la sin raz?n patol?gica de sus protagonistas. El autor consigue as? afiliar su novela a una saga de ficciones que desde G?rard de Nerval () hasta , de S?bato, pasando por, de Breton, conduce la relaci?n amorosa al fant?stico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relaci?n amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcci?n imaginaria en la que los amantes parecer?an ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magn?fica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del g?nero, sino porque la leemos con extra?eza y emoci?n en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creaci?n y de la cual se separa, tambi?n, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional.Aurelia) hasta , de S?bato, pasando por, de Breton, conduce la relaci?n amorosa al fant?stico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relaci?n amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcci?n imaginaria en la que los amantes parecer?an ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magn?fica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del g?nero, sino porque la leemos con extra?eza y emoci?n en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creaci?n y de la cual se separa, tambi?n, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional.El t?nel, de S?bato, pasando por, de Breton, conduce la relaci?n amorosa al fant?stico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relaci?n amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcci?n imaginaria en la que los amantes parecer?an ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magn?fica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del g?nero, sino porque la leemos con extra?eza y emoci?n en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creaci?n y de la cual se separa, tambi?n, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional. El amor loco, de Breton, conduce la relaci?n amorosa al fant?stico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relaci?n amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcci?n imaginaria en la que los amantes parecer?an ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magn?fica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del g?nero, sino porque la leemos con extra?eza y emoci?n en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creaci?n y de la cual se separa, tambi?n, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relaci?n amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcci?n imaginaria en la que los amantes parecer?an ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magn?fica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del g?nero, sino porque la leemos con extra?eza y emoci?n en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creaci?n y de la cual se separa, tambi?n, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional.Estamos ante una magn?fica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del g?nero, sino porque la leemos con extra?eza y emoci?n en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creaci?n y de la cual se separa, tambi?n, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional.Se tiene que esta novela no solo suscitar? en los lectores la emoci?n que toda buena novela suscita, sino que los conducir? a una zona in?dita, terrible y extrema de la relaci?n amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasi?n irracional.
Siendo como es una historia de amor, alcanza una tensión dramática que nos conduce al delirio y, progresivamente, a la sin razón patológica de sus protagonistas. El autor consigue así afiliar su novela a una saga de ficciones que desde Gérard de Nerval () hasta , de Sábato, pasando por, de Breton, conduce la relación amorosa al fantástico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relación amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcción imaginaria en la que los amantes parecerían ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magnífica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del género, sino porque la leemos con extrañeza y emoción en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creación y de la cual se separa, también, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional.Aurelia) hasta , de Sábato, pasando por, de Breton, conduce la relación amorosa al fantástico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relación amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcción imaginaria en la que los amantes parecerían ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magnífica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del género, sino porque la leemos con extrañeza y emoción en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creación y de la cual se separa, también, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional.El túnel, de Sábato, pasando por, de Breton, conduce la relación amorosa al fantástico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relación amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcción imaginaria en la que los amantes parecerían ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magnífica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del género, sino porque la leemos con extrañeza y emoción en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creación y de la cual se separa, también, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional. El amor loco, de Breton, conduce la relación amorosa al fantástico escenario del misterio y el horror.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relación amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcción imaginaria en la que los amantes parecerían ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magnífica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del género, sino porque la leemos con extrañeza y emoción en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creación y de la cual se separa, también, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional.Solo en apariencia se trata de una novela realista. A medida que el relato avanza y la trama descubre la complejidad de esta relación amorosa, entramos al universo de la demencia, a esa construcción imaginaria en la que los amantes parecerían ser enemigos que se buscan o se enfrentan antes de alcanzar el umbral de la tragedia.Estamos ante una magnífica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del género, sino porque la leemos con extrañeza y emoción en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creación y de la cual se separa, también, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional.Estamos ante una magnífica novela, inclasificable, no porque no tenga antecedentes en la historia del género, sino porque la leemos con extrañeza y emoción en el panorama de la narrativa colombiana, en la cual se inscribe como creación y de la cual se separa, también, como un raro hallazgo.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional.Se tiene que esta novela no solo suscitará en los lectores la emoción que toda buena novela suscita, sino que los conducirá a una zona inédita, terrible y extrema de la relación amorosa, al infierno del delirio que es, por supuesto, el destino de toda pasión irracional.